Nuestro compromiso con la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual nos lleva a programar actividades significativas para ellos, incrementando en este caso su participación en tareas que permiten su incursión en el mundo de la agricultura autosuficiente, fomentando la promoción de la salud a través de los alimentos sanos y la prevención de un gran problema actual, como es la obesidad y el sobrepeso.
Hemos adecuado una zona del servicio Residencial “Luis Pastor” para instalar un invernadero de tela pequeño, dotándolo de un adecuado sistema de riego y de bolsas de fibra de coco para el cultivo de hortalizas e hierbas aromáticas. Planificaremos actividades para impulsar el uso del
huerto y el consumo de los productos cultivados. Los resultados de la puesta en marcha de programas de este tipo tienen un elevado impacto en la calidad de vida de las personas, ya que un
huerto saludable permite una mejora en las dimensiones de bienestar emocional, relaciones interpersonales, autodeterminación, promoción de la salud a través de alimentos sanos, relajación, generación de espacios lúdicos, etc.





